La calle Cardenal Herrero es una de las arterias más turísticas y emblemáticas de Córdoba. Discurre paralela al muro norte de la Mezquita-Catedral, conectando la calle Torrijos y la calle de la Judería al oeste con la calle Magistral González Francés al este. Su denominación actual rinde memoria al obispo de Córdoba Sebastián Herrero y Espinosa de los Monteros.
Historia
Históricamente, la calle estuvo dividida en varios tramos: el sector desde Torrijos hasta la calle Céspedes se denominaba Calle Puerta del Perdón, mientras que el tramo restante hasta la actual Magistral González Francés era conocido como la Calle del Caño Gordo.
Desde los años cuarenta hasta el auge turístico de los sesenta, la calle mantenía una actividad comercial vecinal hoy desaparecida. En este espacio convivieron tres farmacias (destacando la de Agustín García Solano), el Colegio de San Eulogio —impulsado por Antonio Moyano Criado—, la barbería de Rafael Carreras y establecimientos tradicionales como el puesto de jeringos de Juana en la esquina con la Judería.
Edificios y Monumentos
| Elemento | Tipo | Descripción |
|---|---|---|
| Mezquita-Catedral | Monumento | Acceso principal a través de la imponente Puerta del Perdón. |
| Virgen de los Faroles | Altar | Altar exterior situado en el muro de la Mezquita, obra de Julio Romero de Torres (copia actual). |
| Fuente del Caño Gordo | Hidráulica | Fuente adosada al muro de la Catedral, una de las más antiguas de la ciudad. |
| Arca del Agua | Infraestructura | Antiguo registro de aguas situado junto a la fuente. |
Actividad Comercial
La calle ha pasado de ser un centro de servicios para los residentes del barrio a un enclave mayoritariamente turístico.
- Hostelería: Restaurante El Caballo Rojo, Hotel Marisa, Hotel - Restaurante Los Patios.
- Desaparecidos: Bar La Mezquita, Barbería de Carreras, Farmacia del Licenciado Alcalá.

