Pequeñísima como un oratorio, tenía que ser del siglo XVII toda vez que la imagen, muy buena, es barroca de esa época. Estaba al final de la calle Ancha y en la década de los 50-60 desapareció.
Actualmente se ha levantado una nueva gracias a la iniciativa y trabajo de nuestro buen amigo José Gil Montaño.(q.e.p.d.).