Convento Madre de Dios

El Convento Madre de Dios, de la Tercer Orden de Penitencia, con 80 religiosos según el Catastro de Ensenada de 1752 y situado extramuros de la ciudad, estaba ubicado en la actual avenida de la Fuensanta y disponía de unos 2000 m², desde las Lonjas hasta el antiguo cuartel de la Policía Local de Córdoba, junto a la actual Iglesia de Santa María conocida como Iglesia Madre de Dios, obra inacabada del siglo XIX y de propiedad del Obispado pero de uso municipal y que en diciembre de 2015 comenzó su proceso de apuntalamiento. Era la iglesia asociada al Convento Santa Madre de Dios que existió en el entorno y tuvo diferentes usos como caballerizas, fábrica o asilo de mendicidad, entre otras. El antiguo terreno del convento es ocupado hoy por la Casa de Acogida así como por la Casa de la Juventud.

Historia

La iglesia del convento es del siglo XVII. Allí estuvo una de las primeras cofradías de Córdoba: la hermandad de la Pasión de Cristo, una de las primeras hermandades Semana santa cordobesa. La hermandad, que comenzó su andadura en el convento dominico de los Santos Mártires hasta su traslado hasta este tempo, desde donde salía el Miércoles Santo o el Jueves Santo de forma indistinta.

Durante la invasión francesa fue objeto de robos y expolio de sus imágenes. El espacio fue utilizado por los franceses durante la ocupación y no sería hasta 1814 cuando los frailes comenzaron a reconstruir aquel templo. Apenas siete años después, en 1821, una orden nacional suprimía todos los conventos de menos de 20 personas y el de Madre de Dios se vio afectado. En 1836 con las desamortizaciones de Mendizabal, la ley bajó el número de frailes a 12, y la orden de abandonar el templo sería definitiva. El obispado cedió al Ayuntamiento de Córdoba el terreno para la construcción del asilo municipal, el denominado Asilo Madre de Dios, bajo la dirección del sacerdote Agustín Moreno. Desde la cesión no hubo ninguna reparación seria la iglesia. En 2015 el Ayuntamiento acometió una reparación de urgencia en las techumbres y en junio de 2019 para evitar que el templo se derrumbara.