María Escribano García

María Escribano García, en 2023.

María Escribano García es una empresaria y hostelera cordobesa, conocida por ser la gerente y propietaria del emblemático restaurante El Caballo Rojo. Es nieta de José García Marín, fundador del restaurante, representando la tercera generación al frente del negocio familiar.

Aunque inicialmente estudió medicina, su vocación por la hostelería la llevó a incorporarse al negocio familiar. Comenzó trabajando en administración alrededor de 2014, aprendiendo la gestión del restaurante bajo la tutela de su abuelo y su madre, antes de pasar a la sala. Asumió la propiedad plena del establecimiento en noviembre de 2022, tras un periodo de cierre de casi dos años debido a la pandemia de COVID-19.

Bajo su dirección, El Caballo Rojo ha iniciado una etapa de renovación que busca conjugar la tradición culinaria del restaurante con tendencias actuales. Mantiene platos emblemáticos de la casa, basados en la cocina mozárabe-magrebí, como el rabo de toro, la paletilla de cordero a la miel, el rape mozárabe o las alcachofas a la montillana, considerados parte esencial de la historia del local. Al mismo tiempo, ha introducido innovaciones en la carta con la colaboración del chef Antonio Crespo y el jefe de pastelería Miguel Serrano, incorporando nuevas técnicas, presentaciones y sabores, incluyendo postres personalizados en lugar del tradicional carrito.

Uno de sus objetivos es hacer el restaurante más accesible y dinámico, fomentando el uso de la taberna y el patio para un consumo más informal y de tapeo, con mesas altas, buscando atraer a un público más joven y romper la percepción de que El Caballo Rojo es exclusivamente para grandes eventos o comidas formales. Mantiene un fuerte énfasis en la calidad del producto, priorizando materias primas de Córdoba y Andalucía, como aceites, quesos, verduras de la Vega del Guadalquivir e ibéricos.

Escribano destaca la importancia del equipo humano, refiriéndose a la plantilla como "la familia de El Caballo Rojo", y valora la profesionalidad del servicio como uno de los sellos distintivos del restaurante, con empleados de larga trayectoria como Manuel Domínguez. Es consciente de la responsabilidad que implica mantener el legado de su abuelo y la marca El Caballo Rojo, un referente gastronómico situado en la Judería, junto a la Mezquita-Catedral.

Es miembro de la Junta Directiva de Hostecor