Cortijo de Villarrubia que data de finales del siglo XVIII y que desde sus inicios ha sido dedicado a la crianza de reses bravas. En propiedad de las Condesas de Artázar y el Marqués de Murrieta, hacia 1940, se realizaban en la finca carreras de galgos para la caza de liebres y tientas a las que asistieron entre otros Manuel Rodríguez Sánchez "Manolete" y Rafalito "Lagartijo Chico" en señal de la amistad que existía entre éstos y aquéllos.
Se encuentra a 13,7 Km. de Córdoba, entre la pedanía de Villarrubia y el pueblo de Almodóvar del Río, teniendo su acceso a través de la carretera de Córdoba a Palma del Río.