La aceituna Arbequina es una variedad originaria de Cataluña, concretamente de la localidad de Arbeca, en la provincia de Lérida, de donde toma su nombre. Sin embargo, en las últimas décadas se ha expandido con fuerza por toda España, incluida la provincia de Córdoba, debido a su alta productividad, precocidad en la entrada en producción y facilidad para el cultivo en seto o superintensivo.
Origen e introducción en Córdoba
Aunque su cultivo en Córdoba es relativamente reciente en comparación con variedades tradicionales como la Picual o la Hojiblanca, la Arbequina se ha convertido en una opción muy valorada, sobre todo por grandes explotaciones olivareras que apuestan por modelos más intensivos de producción. Su facilidad para mecanizar y su rápido retorno económico han contribuido a su implantación.
Características del árbol y el fruto
El olivo Arbequino es de tamaño reducido, con porte abierto y ramas delgadas, lo que facilita su recolección mecanizada. Se adapta bien a terrenos pobres y a climas variados, aunque sufre más en condiciones de sequía prolongada.
El fruto es pequeño y redondeado, de maduración temprana. Tiene un elevado rendimiento graso en proporción a su tamaño, aunque menor que el de la Picual, pero destaca por la calidad del aceite obtenido.
Perfil del aceite
El aceite de oliva virgen extra de Arbequina es suave, dulce y muy aromático. Destaca por su baja acidez y escaso contenido en compuestos fenólicos, lo que le da un sabor poco amargo y nada picante. Sus aromas recuerdan a frutas maduras, plátano, manzana, almendra y hierba fresca.
Esta suavidad lo hace ideal para consumidores que no aprecian los aceites más intensos y picantes, y es muy popular en mercados internacionales, especialmente en Estados Unidos y Asia.
Usos y aplicaciones
El aceite de Arbequina es excelente para el consumo en crudo: aliños, mayonesas, repostería y platos donde se desea que el aceite no domine el sabor. Sin embargo, su baja estabilidad lo hace menos apto para frituras o cocciones prolongadas.
Cultivo en Córdoba
En Córdoba, la Arbequina se encuentra especialmente en fincas de olivar superintensivo, donde su adaptabilidad a sistemas modernos y la posibilidad de obtener cosechas a los dos o tres años de la plantación la han convertido en una opción rentable. Está presente en explotaciones de la Campiña y del Valle del Guadalquivir.
Impacto económico y perspectivas
El cultivo de Arbequina en Córdoba está ligado a la modernización del sector oleícola. Si bien no tiene un peso dominante, su papel como complemento estratégico para diversificar la producción y abastecer nichos de mercado específicos es innegable.